miércoles, 26 de octubre de 2011

Cómo el “mundo verdadero” acabó convirtiéndose en una fábula

Del ocaso de los ídolos de F. Nietzsche.
 
Esto no es una pipa

Historia de un error
1.  El mundo verdadero, asequible al sabio, al piadoso, al virtuoso, -él vive en ese mundo, es ese mundo.
(La forma más antigua de la Idea, relativamente inteligente, simple, convincente. Transcripción de la tesis «yo, Platón, soy la verdad»).
2.  El  mundo verdadero, inasequible por ahora, pero prometido al sabio, al piadoso, al virtuoso («al pecador que hace penitencia»).
(Progreso de la Idea: ésta se vuelve más sutil, más capciosa, más inaprensible, -se convierte en una mujer, se hace cristiana...).
3. El mundo verdadero, inasequible, indemostrable, imprometible, pero ya en cuanto pensado, un consuelo, una obligación, un imperativo.
(En el fondo, el viejo sol, pero visto a través de la niebla y el escepticismo; la Idea, sublimizada, pálida, nórdica, königsburguense).
Gottfried Helnwein
4. El mundo verdadero -¿inasequible?  En todo caso, inalcanzado. Y en cuanto inalcanzado, también  desconocido. Por consiguiente, tampoco consolador, redentor, obligante: ¿a qué podría obligarnos algo desconocido? ...
(Mañana gris.Primer bostezo de la razón. Canto del gallo del positivismo).
5. El  «mundo verdadero» -una Idea que ya no sirve para nada, que ya ni siquiera obliga, -una Idea que se ha vuelto inútil, superflua,  por consiguiente  una Idea refutada:
¡eliminémosla!
(Día claro; desayuno; retorno del bon sens y de la jovialidad; rubor avergonzado de Platón; ruido endiablado de todos los espíritus libres) 
6. Hemos eliminado el mundo verdadero: ¿qué mundo ha quedado?, ¿Acaso el aparente?... ¡No!, ¡al eliminar el mundo verdadero hemos eliminado también el aparente!
(Mediodía; instante de la sombra más corta; final del error más largo; punto culminante de la humanidad; INCIPIT ZARATHUSTRA).

miércoles, 19 de octubre de 2011

Caverna de Platon VI-Potencia tu memoria

Sombras de personas hechas con basura. Tim Noble

Dejo los últimos 3 vídeos de esta serie de 10 de la Nat Geo “Juegos Mentales” para rematar el material recopilado desde el vídeo de The Matrix.
En la próxima edición empezaré una reflexión desde la filosofía acerca del mito de la Caverna, donde iré haciendo referencia a los vídeos y a textos de F. Nietzsche como son “El ocaso de los ídolos”, un tanto a la luz de la interpretación de M. Heidgger,  y el texto rector de esta lectura el Zaratustra.
Lo apasionante de lo que viene estriba en que podremos pasear un poco por el alma de los poetas, místicos y músicos, esos audaces navegantes en las tierras de nadie. Ya tenemos las herramientas suficientes para la embriaguez de tal aventura, la de tocar a las puertas del mismo Olimpo, de las musas,  y bordear los peligros del jardín o selvas de Dionisos.



sábado, 15 de octubre de 2011

miércoles, 12 de octubre de 2011

Caverna de Platon IV

“NO IRMOPTA EL OEDRN EN QUE ETÉSN LAS LATRES,  SLÓO QUE LA PMERIRA Y LA ÚMLITA ESÉTN EN EL LAGUR CRROECTO”, aseguran los ilusionistas.
I
Se preguntarán que tiene que ver toda esta serie y el mito de La caverna de Platon.
F. Nietzsche destroza a golpe de mazos toda la filosofía platónica, desmonta el idealismo platónico.  
El ideal ascético es pulverizado y superado mediante el ideal estético. El filósofo y el sacerdote han sido los magos, los ilusionistas por excelencia que han logrado mediante la filosofía y su religión enfermar toda salud humana sobre la tierra.
Uno de los tantos ardides filosóficos del idealismo ha sido a manera de truco ilusionista el mito de la caverna.
Al finalizar esta serie publicaré una edición específicamente sobre el mito de la caverna, ese truco y ardid de ilusionista en el que ya más de 2 mil años de filosofía la humanidad todavía está cautiva.
II
Daniel Simons, es un prominente psicólogo experimental, especialista en ciencia cognitiva, y catedrático del Departamento de Psicología y del Instituto Beckham de la Universidad de Illinois. Sus trabajos de investigación exploran los límites de nuestra mente y buscan comprender por qué tantas veces ignoramos nuestros propios límites.
O Bas Rokers, doctor en psicobiología y en neurociencia cognitiva especialista en la utilización de neuroimágenes (resonancia nuclear magnética funcional –fMRI por sus siglas en inglés–), y en la realización de experimentos psicofísicos y modelos de simulación por computadora, todo con el fin de descifrar los mecanismos de los movimientos visuales y la percepción de la profundidad.
III

viernes, 7 de octubre de 2011

Caverna de Platon III

¿Es confiable nuestro cerebro?  No mucho.
El mago David Copperfield
I
La metáfora es un código que abre hacia la locura de la poesía, pero no todos están llamados para investir tan peligroso rango.
Cuando una hoja en el otoño con todos sus colores se desprende en la brisa del atardecer para entregarse a la tierra, recorre un breve instante entre acordes y vaivenes.
Este inocente acto puede ser visto o sentido, el prestidigitador solo lo ve y su relación parte del ojo, el poeta aparte de verlo lo siente y lo celebra y su relación es desde el corazón, pero para eso hay que estar loco, es decir trascender y armonizar sentidos y nervios en la danza interna del universo, en su blues más sentido.
Esta también ya es una tarea de la metaestética, del "arte total"
DE MARZO DEL 79’ (1983)
Cansado de todos los que llegan con palabras, palabras, pero no lenguaje
parto hacia la isla cubierta de nieve.
Lo salvaje no tiene palabras.
¡Las páginas no escritas se ensanchan en todas direcciones!
Me encuentro con huellas de pezuñas de corzo en la nieve.
Lenguaje, pero no palabras.
Tomas Tranströmer

II
Reproduciré en tres ediciones un interesante programa de NatGeo sobre una investigación del cerebro y sus complejidades que responderá muchos interrogantes. La serie se titula Juegos Mentales y la primera parte trata sobre la atención, se titula Presta Atención.
Este episodio sobre la atención fue filmado en Las Vegas, una ciudad que exige mucha atención.
Los guías durante el episodio fueron los magos David Copperfield y  Apollo Robbins, cuyas habilidades para manipular la atención del público producen ilusiones extraordinarias. 
Los magos como David Copperfield y Apollo Robbins “El caballero ladrón”, conocen la psicología humana tanto como un científico, y muestran cómo usan este conocimiento del cerebro para realizar sus trucos. 
Los especialistas científicos mostrarán sus conocimientos sobre la atención creando ilusiones que rivalizan con la de los grandes magos. 
¿Creería usted posible que alguien transmute su apariencia en frente suyo sin que usted lo note? ¿O que el fondo, ropa y accesorios de una escena sean modificados sin que usted se percate? 
En este primer episodio de la serie, Juegos Mentales: ¡Presta atención! Copperfield y Robbins demuestran lo frágil que resulta la atención del cerebro y cómo –debidamente controlada– la atención de la gente es susceptible de sufrir el llamado “cambio de ceguera”. 
El mago Apollo Robbins "El caballero ladrón"
Esto significa, que los humanos somos capaces de dejar pasar enormes detalles y no percibir cambios dramáticos de nuestro entorno que se desarrollan frente a nosotros, por puro acondicionamiento del cerebro.
“Como ilusionistas nosotros tomamos todos los conceptos que tiene la gente y los usamos para poner el mundo al revés. Si puedes desviar su atención hacia otro lado a placer, habrás hecho tu trabajo correctamente”, explica Copperfield cuya extraordinaria habilidad para manipular la atención del público y producir ilusiones espectaculares es ampliamente reconocida. 
Su socio Apollo Robbins complementa la idea: “Todos nosotros creemos poner atención a nuestro mundo alrededor, pero por más extraño que suene, eso es tan solo una ilusión”.
Créase o no, el embudo de atención que filtra el torrente de estímulos que entra al cerebro es tan limitado que puede pasar un gorila delante de las personas sin que se vea.

Moisés deja de hacer tus gracias!
No estaría por demás reflexionar acerca de cómo estos métodos se pueden usar en la publicidad, la propaganda, la información noticiosa, la educación en todas sus facetas. También, claro está en la inmensa posibilidad de la poesía como herramienta de consciencia y de liberación…